El Miercoles, para ir planificando la llegada de novedades del Salón llamamos a la distribuidora de zona de Norma para que nos confirmaran cuando iban a llegar las novedades. Nos dijeron que a ellos no les habían llegado todavía. Sorprendido, llamé al dia siguiente y me dijeron que tampoco, y el Viernes, cual no sería nuestra sorpresa al oir que ellos no las recibirian hasta el lunes. Es una cosa de lo más extraña pero bueno, al menos ninguna tienda las tendría y no habría problemas. Pero oh sorpresa, hoy por la tarde nos enteramos de que en la FNAC tenían las novedades y esto es porque a ellos les sirve directamente Norma. En serío, no sabeis la falta de etica y profesionalidad que este gesto supone y el daño que le hace a muchos libreros, gracias a los cuales esta editorial come el resto del año.
El público en general no suele darse cuenta de estos chanchullos y jugarretas, pero a poco que sean avispados deben darse cuenta de que el Salón es una mina de oro para las editoriales, sobre todo para las grandes.
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